INFORME ESPECIAL
“Operación Journeyman”,
despliegue preventivo de la Royal Navy en el Atlántico Sur (1977)
A MODO DE INTRODUCCIÓN
Poca difusión tiene este
singular suceso político-militar que forma parte de los antecedentes de la
guerra que se libraría en 1982 entre la República Argentina y el Reino Unido
por la disputa de soberanía sobre las islas del Atlántico Sur. La “Operación
Journeyman” se mantuvo casi en secreto absoluto hasta 2005, fecha en que fueron hechos
públicos algunos documentos clasificados en el Reino Unido.
Me propongo con este "Informe Especial" poner un jalón más en pos de difundir la existencia de hechos poco conocidos relacionados con nuestros archipiélagos usurpados en el siglo XIX por la potencia colonial europea, en la creencia de que siempre es bueno conocer más, ya que "no se puede amar lo que no se conoce". También el marco en el que se desarrollaron estos hechos sirve de excusa para saber un poco más sobre estas lejanas islas australes que tienen mucha “menor prensa” que los otros archipiélagos en litigo: Malvinas y Georgias del Sur.
Me propongo con este "Informe Especial" poner un jalón más en pos de difundir la existencia de hechos poco conocidos relacionados con nuestros archipiélagos usurpados en el siglo XIX por la potencia colonial europea, en la creencia de que siempre es bueno conocer más, ya que "no se puede amar lo que no se conoce". También el marco en el que se desarrollaron estos hechos sirve de excusa para saber un poco más sobre estas lejanas islas australes que tienen mucha “menor prensa” que los otros archipiélagos en litigo: Malvinas y Georgias del Sur.
LAS ISLAS SANDWICH DEL SUR
El archipiélago de las
Sandwich del Sur constituye el grupo de las islas subantárticas ubicadas más al
este del continente americano. Está constituido por once islas principales,
islotes y rocas alineadas de tal manera que conforman un arco convexo hacia el
este, con extremos en las coordenadas: latitud 56° 14’ S, longitud 27° 35’ W y
latitud 59° 27’ S, longitud 26° 20’ W. Las islas son pequeñas y ocupan una
superficie total de aproximadamente 310 km2, siendo la Isla Jorge
(Conocida también como Montagú) la de mayor superficie con 110 km2 y
la Isla Leskov la de menor superficie con 0,3 km2. Las islas constituyen
formaciones de origen volcánico (Con cierta actividad volcánica permanente en algunas), con
costas de difícil acceso o acantiladas, elevaciones y poco resguardo, por lo
que no poseen población estable permanente. Algunas están cubiertas parcialmente con
glaciares, hielos y nieves permanentes, aunque también se caracterizan por su suelo rocoso cubierto en las zonas costeras con guano de la fauna local
constituida mayormente por pingüinos. El clima es realmente inhóspito y
riguroso, con vientos fuertes (Generalmente del sudoeste), bruma (No es
habitual encontrar días con cielo despejado, y éstos sólo son visibles durante el
corto verano), niebla y nevadas, determinando un porcentaje de mal tiempo
dominante, cercano al 90%. La temperatura promedio oscila entre el 0,5°C (en
verano) y los -13,1°C (en invierno).
Las islas del
archipiélago Sandwich del Sur conforman a su vez los siguientes agrupamientos:
-
Islas Traverse: Zavodovski, Leskov y Visokoi
-
Islas Candelarias: Candelaria y Vindicación
-
Islas Centrales: Saunders, Jorge (Montagú) y
Blanca (Bristol)
-
Islas Tule del Sur: Bellinshausen, Tule (Thule o
Morrel) y Cook.
No es un punto menor señalar
que el primer establecimiento humano en las islas fue producto del esfuerzo
argentino, que consistió en la construcción del refugio Teniente Esquivel en la Isla Tule, por parte de la Armada Argentina a fines de 1955. Durante el lapso
de un mes un guardiamarina y dos radioaficionados vivieron totalmente aislados
en las duras condiciones que presenta el terreno y el clima isleño, debiendo
ser evacuados de urgencia al registrarse actividad volcánica en la vecina Isla
Cook, y emanaciones sulfurosas y fumarolas en la propia isla Tule.
ARGENTINA CONSTRUYE UNA BASE CIENTÍFICA EN
TULE
El 7 de noviembre de
1976 una expedición militar argentina desembarca en la Isla Tule, del grupo Tule del Sur, perteneciente al
archipiélago Sandwich del Sur con la finalidad de instalar un observatorio
científico permanente que sirviera de punto de partida para afianzar el reclamo
de soberanía sobre ese territorio insular austral. De esta forma Argentina
demostraba el interés efectivo no sólo por las islas Sandwich del Sur en sí,
sino por establecer un punto de referencia estratégico para su proyección sobre
la Antártida.
Participaron de la
operación dos (2) buques de la Armada Argentina: el rompehielos ARA “General San
Martín” (Q-4) y el transporte naval ARA “Bahía Aguirre” (B-2) que realizaron
varios viajes para llevar el equipo y el material de construcción necesario
para preparar el terreno y montar las instalaciones. La construcción de la base
estuvo a cargo del Batallón de Construcciones de la Armada Argentina y no
estuvo exenta de dificultades por la complejidad del terreno constituido
mayormente de roca volcánica.
>> ARA "Gral.San Martín" (Q-4) - (Fuente: histarmar.com.ar)
>> ARA "Bahía Aguirre" (B-4) - (Fuente: histarmar.com.ar)
Cuatro meses más
tarde, los esfuerzos se veían coronados, cuando con fecha 18 de marzo de 1977
se inaugura oficialmente la Base Científica Corbeta Uruguay orientada a la
realización de investigaciones meteorológicas, oceanográficas y glaciológicas. La
misma estaba conformada por tres secciones de construcciones elevadas sobre
pilotes, con techo a dos aguas con leves declives (La casa principal, la de emergencia y la de servicios generales), que
se encontraban comunicadas entre sí por un conducto de sección semicircular en uno
de los laterales que permitía la libre circulación del personal sin exponerse a
los rigores climáticos del exterior. También fue instalado un depósito, un
resguardo para el instrumental meteorológico y un mástil para izar la bandera
nacional. La idea era establecer una presencia argentina permanente, con
científicos e investigadores que se renovaran anualmente durante las Campañas
Antárticas de verano (Tal cual sucede en las Bases Antárticas), estableciendo
una población de cuarenta hombres en verano y una docena en invierno.
“OPERACIÓN JOURNEYMAN”. DESPLIEGUE BRITÁNICO PREVENTIVO
Los británicos
descubrieron el desembarco del personal científico y militar argentino en la
Isla Tule pocos días después de haberse producido, más precisamente el día 20 de diciembre de
1976, cuando un helicóptero del patrullero polar HMS “Endurance” (A-171) sobrevoló el archipiélago en un vuelo de exploración de rutina. El encargado de negocios argentinos en
Londres fue llamado al Foreign Office, donde fue interpelado por el Jefe del
Departamento para América Latina que le exigió explicaciones sobre el asunto.
De la misma manera el encargado de negocios británico en Buenos Aires recibió
instrucciones para pedir explicaciones de parte del Ministerio de Relaciones
Exteriores argentino.
El canciller argentino,
Antonio Vañek, envió a mediados de enero como respuesta una comunicación
informal donde daba cuenta del propósito científico de la base de investigación
en Tule y su carácter de asentamiento no permanente. La respuesta no se hizo
esperar. El 19 de enero de 1977 el gobierno del Reino Unido enviaba una protesta formal
a su par argentino, considerando que el establecimiento de la estación
científica era violatoria de su soberanía y que esperaba que se diera marcha
atrás al asentamiento en Tule. No obstante esto, el gobierno británico realizó esfuerzos para que la acción argentina no se hiciera pública ni se filtrara a la prensa, a fin de evitar una escalada diplomática de mayor envergadura.
Por otra parte, y ante la insistencia argentina por entablar negociaciones por cuestiones de soberanía sobre las islas australes bajo posesión del Reino Unido, la
Comisión de Defensa del Parlamento británico inició acciones para dar inicio a
conversaciones bilaterales con el gobierno argentino con la finalidad de discutir
“tema generales relativos al futuro de las Islas Malvinas”. En este marco de acción el secretario del Foreign Office, Edward
Rowlands viajó primero a Malvinas y luego a Buenos Aires.
Luego de este viaje y
fruto de nuevas conversaciones, el 26 de abril se anunció el inicio de
negociaciones bilaterales sobre políticas futuras y cuestiones de soberanía
sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, a partir de
Junio o Julio de 1977. Las conversaciones, llevadas a cabo en Roma, mostraron una estrategia
británica tendiente a dilatar cualquier decisión, ganar tiempo, lograr alguna
cooperación económica conjunta y diferir cualquier respuesta a una potencial propuesta
de “leaseback” por parte argentina.
Informes de
inteligencia británicos dieron cuenta de un posible endurecimiento en las
posición argentina con respecto al reclamo de soberanía sobre las islas
australes para la segunda ronda de conversaciones programadas en Nueva York
para el mes de diciembre, no descartando incluso que el gobierno argentino
recurriera a la acción militar directa para fortalecer su posición y mostrar su
determinación.
El gobierno del Reino
Unido, a cuya cabeza estaba el primer ministro James Callaghan (Partido
Laborista), temeroso de que Argentina ejecutara acciones similares a la de Tule
sobre las islas Georgias del Sur y Malvinas decidió en una reunión de ministros
celebrada el 21 de noviembre de 1977 el envío de una pequeña Task Force (TF) de
la Royal Navy con fines disuasorios. Su presencia en el Atlántico Sur, que
coincidiría con la segunda ronda de negociaciones, tenía como objetivo
fortalecer la posición negociadora del gobierno y prevenir cualquier acción
militar que pudiera tomar el gobierno argentino para forzar el rumbo de las
conversaciones sobre soberanía. De todos modos se acordó no dar aviso al
gobierno argentino, a no ser que fuera estrictamente necesario por el rumbo de
las reuniones.
La operación militar,
que se desarrolló en el más absoluto secreto, fue bautizada con el nombre clave
de “Journeyman” ("Viajero" en castellano). La TF naval se
conformó de urgencia con las siguientes unidades:
HMS Dreadnought (S101) – Submarino de ataque de propulsión nuclear, el primero de su tipo en la RN.
Captain Hugh Mitchell
Captain Hugh Mitchell
HMS Phoebe (F42) – Fragata Clase Leander.
Captain Hugh Balfour (Comandante de la Fuerza de Tareas)
HMS Alacrity (F174) – Fragata Clase Type 21 Amazon.
Captain Hugh Balfour (Comandante de la Fuerza de Tareas)
HMS Alacrity (F174) – Fragata Clase Type 21 Amazon.
Captain Robert Mortlock
RFA Resource (A480) – Buque de reaprovisionamiento Clase Regent.
RFA Resource (A480) – Buque de reaprovisionamiento Clase Regent.
RFA Olwen (A122) – Buque tanque de flota Clase OL.
>> HMS "Dreadnought" (S101) - (Fuente: forum.sub.driver.com)
>> HMS "Phoebe" (F42) - (Fuente: worldnavalships.com)
>> HMS "Alacrity" (F174) - (Fuente: club.mil.sina.com.cn)
>> HMS "Resource" (A480) - (Fuente: rfanostalgia.org)
>> HMS "Olwen" (A122) - (Fuente: ja.wikipedia.org)
Los buques fueron convocados
a toda prisa y una vez reaprovisionados zarparon rumbo al Atlántico Sur a
cumplir la misión encomendada a sus capitanes. La fragata HMS “Phoebe” por
ejemplo se encontraba amarrada en el puerto de Amberes, Bélgica, en una visita
de cortesía, luego de regresar de unos ejercicios navales al norte de Escocia, cuando
su capitán Hugh Balfour recibió la orden de zarpar rumbo Plymouth para recoger
suministros y ejecutar una misión clasificada como “top secret”. Una vez
completado el aprovisionamiento (vituallas, armamento y combustible) y con
nuevas órdenes, la fragata zarpó hacia al Atlántico Sur uniéndose en su
navegación el resto de los buques de superficie seleccionados para la
operación. Como vanguardia del grupo de buques de superficie se había destacado
al submarino nuclear HMS “Dreadnougth”.
Las dos fragatas antisubmarinas fueron seleccionadas por estar equipadas con la última tecnología de comunicación satelital y por contar entre su armamento con misiles superficie-superficie MM38 Exocet a razón de 4 (cuatro) por unidad, lo que las convertía en una nada despreciable amenaza para cualquier incursión naval de la Armada Argentina.
El buque tanque RFA "Olwen" zarpó no sólo con sus depósitos al tope de combustible sino también con su máximo componente aéreo, conformado por 4 (cuatro) helicópteros Sea King.
La partida del buque de reaprovisionamiento RFA "Resource" con abundantes provisiones fue justificada como una misión a aguas del Caribe para proteger Belice. Pero en general el despliegue de los buques se cubrió bajo la forma de un ejercicio naval en el Océano Atlántico sin especificar mucho más hacia afuera del Foreing Office. Las tripulaciones fueron puestas al tanto de la operación promediando la navegación hacia el sur. Las fragatas zarparon de las islas británicas con provisiones para 3 (tres) meses de operaciones, que se extendían por seis semanas más con el apoyo de los dos buques de apoyo y reaprovisionamiento de la RFA que las acompañaban.
Las dos fragatas antisubmarinas fueron seleccionadas por estar equipadas con la última tecnología de comunicación satelital y por contar entre su armamento con misiles superficie-superficie MM38 Exocet a razón de 4 (cuatro) por unidad, lo que las convertía en una nada despreciable amenaza para cualquier incursión naval de la Armada Argentina.
El buque tanque RFA "Olwen" zarpó no sólo con sus depósitos al tope de combustible sino también con su máximo componente aéreo, conformado por 4 (cuatro) helicópteros Sea King.
La partida del buque de reaprovisionamiento RFA "Resource" con abundantes provisiones fue justificada como una misión a aguas del Caribe para proteger Belice. Pero en general el despliegue de los buques se cubrió bajo la forma de un ejercicio naval en el Océano Atlántico sin especificar mucho más hacia afuera del Foreing Office. Las tripulaciones fueron puestas al tanto de la operación promediando la navegación hacia el sur. Las fragatas zarparon de las islas británicas con provisiones para 3 (tres) meses de operaciones, que se extendían por seis semanas más con el apoyo de los dos buques de apoyo y reaprovisionamiento de la RFA que las acompañaban.
La FT británica no
tenía por finalidad expulsar a los argentinos de Tule, si no disuadir y evitar,
llegado el caso, que fuerza argentinas desembarcaran y se establecieran en algún
sector de los otros dos grandes archipiélagos en disputa: Georgias del Sur y
Malvinas. Para ello procuraron establecer una zona de seguridad de 50 millas
náuticas (92,6 km) en derredor de las costas de las mismas, que por supuesto no
fue declarada oficialmente. La orden era identificar a todo buque que ingresara en la misma para establecer los propósitos
o fines de su navegación por esas aguas. Para preservar el secreto de la operación los buques nunca amarraron
en Port Stanley ni se dejaron ver por las pocas zonas pobladas de las islas a
custodiar, a fin de preservar el secreto de la operación.
La única excepción al
secreto del despliegue, por supuesto filtrada en forma premeditada, habría sido
la advertencia dada por el gobierno del Reino Unido a su par de Argentina –se
estaban llevando a cabo reuniones bilaterales secretas en Nueva York- de la
presencia en aguas australes de un submarino de ataque con propulsión nuclear
en misión de patrullaje e interdicción. Otras fuentes sin embargo nieguan esta infidencia, asegurando que toda la operación de desarrolló en el máximo secreto.
Teniendo en cuenta que
el submarino es un arma que se vale del sigilo para negar al enemigo el uso del
mar constituyendo una presencia amenazadora y omnipresente para amedrentar o
limitar las operaciones de fuerza navales enemigas, no resulta extraño que al
Comandante del HMS “Dreadnought” se le haya ordenado mantenerse en inmersión la
mayor parte del tiempo. Sólo tenía autorización para emerger 5 minutos a la
semana a fin de posibilitar su aprovisionamiento e informar novedades por sus
sistemas de comunicación. Durante su despliegue en el Atlántico Sur el
submarino aprovechó para recolectar datos hidrográficos y de sonar, que serían
de gran utilidad cinco años más tarde.
Las reglas de empeñamiento que recibieron los comandantes de la FT
podrían resumirse en:
- - Se ha de responder a cualquier agresión con
firmeza táctica con el fin de exhibir determinación para hacer frente a
cualquier escalada, aunque no se deberá exceder la ya realizada por el enemigo.
- - El uso de la fuerza debe regirse por el
principio de utilizar sólo la fuerza mínima necesaria para lograr el objetivo.
Dicha fuerza debe usarse sólo hasta que sea evidente que se ha logrado el
objetivo inmediato y no deberá ser empleada como represalia.
Para el comandante del submarino se elaboró una particular:
- -
En caso de ser atacado con armas antisubmarinas
por las fuerzas argentinas, emergerá o se alejará velozmente en inmersión,
eligiendo a criterio cual será la acción que represente menor riesgo de vida.
A pesar de que lo
mencionado anteriormente pareciera reflejar una toma de decisión muy firme y segura por
parte del gobierno del Reino Unido, la operación generaba muchas dudas desde lo
legal entre los miembros del gabinete. La llamada “Zona de Seguridad” era sólo de
conocimiento de los comandantes de la FT y no fue declarada y advertida públicamente al gobierno argentino
como ocurriría con la “Zona de Exclusión Total (ZET)” en 1982. Aunque hubo voces favorables para hacer
una declaración oficial unilateral, ganó la posición más conservadora, que trataba de evitar una escalada diplomático-militar
de consecuencias impredecibles. Se temía también una denuncia argentina por
ilegalidad ante organismos multilaterales por modificar unilateralmente el
“status quo”, y principalmente la posibilidad potencial de tener que efectuar “el primer disparo” ante una incursión o
provocación naval argentina y todo lo que podía ocurrir a partir de ello,
Luego de permanencer un corto período en el
Atlántico Sur, la FT recibió la orden de regresar a sus bases en Gran Bretaña. La misión fue
catalogada como un éxito tanto por los políticos como por los comandantes
militares. Al fin y al cabo no se produjo ningún desembarco argentino en las
islas "a proteger” ni se registraron incidentes militares. A su regreso los
militares británicos participantes fueron compelidos a guardar el secreto de la
operación incluso ante sus familiares, a los que sólo debían dar cuenta de que se trató de
ejercitación naval de rutina.
Paradójicamente, a
esta sensación de éxito que se vivía en los círculos de poder del Reino Unido, se
contraponía el hecho fáctico de que la Estación Científica Corbeta Uruguay –causa
primigenia que avivó los temores para el despliegue de la FT británica- que había sido ya inaugurada el
18 de marzo de 1977 (casi un año antes) seguía en pie en la isla Tule. Aunque vale aclarar que la
misma fue evacuada durante algunos meses ese mismo año, fruto tal
vez de un acuerdo secreto con los británicos o una decisión unilateral que en los hechos
configuraba una vuelta al estado de situación previo a noviembre de 1976. Sea
el motivo que fuese, el gobierno argentino, encabezado en ese momento por tte.gral. Jorge Rafael Videla, reocupó la base durante la siguiente Campaña Antártica
de verano. Esa presencia estable en Tule del Sur se mantendría de forma ininterrumpoda hasta el 20 de
junio de 1982 cuando la Compañía M del 42 Commando de los Royal Marines desalojó a
la decena de hombres argentinos (9 militares y 1 civil) que se encontraba en la
base, en lo que fue conocido como “Operación Keyhole”, la última acción militar
de la Guerra de Malvinas. Los británicos decidieron no destacar personal en la misma
dejándola abandonada. En diciembre de ese mismo año regresarían para demoler
con explosivos la base argentina a fin de evitar que fuera reocupada, pero esto ya forma parte de otra historia.
SE ACABA EL SECRETO. LA “OPERACIÓN
JOURNEYMAN” SALE A LUZ
Lord David Owen,
secretario del Foreign Office en 1977, fue el primero en mencionar públicamente
la existencia de la “Operación Journeyman” cuando en 1982 fustigó al primer
ministro Margaret Thatcher por no haber ejecutado una acción preventiva similar
que impidiese el desembarco de fuerzas argentinas en las Islas Malvinas evitando de esa forma la guerra que se desató posteriormente. Aducía Owen que había indicios suficientes de que
una acción argentina de este tipo podía desencadenarse y que esta vez no se
había actuado a tiempo ni en forma preventiva, tal como se hizo cinco años antes. Desde el gobierno sin embargo respondían con una critica el accionar del gobierno laborista en 1977, ya que al no desalojar a
los militares y científicos de Tule, ni informar al gobierno argentino de la
conformación y presencia de la Fuerza de Tareas en la zona austral, dieron señales de debilidad y crearon un mal
antecedente con respecto a la reacción que podía esperarse del Reino Unido si
se tomaba alguna acción militar tendiente a desembarcar en las Islas Malvinas y las
Georgias del Sur.
Tiempo después, en
1983 gracias al denominado “Informe Franks” tomó estado público el envío por
parte del gobierno del RU de una fuerza naval constituida por un submarino
nuclear y dos fragatas al Atlántico Sur a fines de 1977. Según este informe el gobierno acordó mantener la
operación en secreto, siendo el objetivo de la FT hacer frente a la amenaza de
una potencial acción militar argentina sobre las islas en disputa. Sin
embargo no se dio a conocer en dicho documento el nombre clave de la operación ni se
dieron mayores precisiones sobre la misma.
Recién en el año 2005,
con la desclasificación de documentos secretos del Ministerio de Defensa británico, se
conocieron con mayor precisión los detalles de la “Operación Journeyman”, como las reglas de empeñamiento. El
documento que se refiere también a la toma de decisiones en el período comprendido entre el 01.01.1977 al 31.12.1978 estaba clasificado como DEFE 24/1245.
Glosario:
Fuerza de Tareas (Task Force): Fuerza naval temporal constituida para desempeñar una operación particular o una misión concreta. El término, que tuvo sus orígenes en la US Navy, se hizo extensivo primero a las Armadas de los países miembros la OTAN y luego fue adoptado por diversos países.
Reglas de Empeñamiento (Rules of Engagement): Instrucciones particulares que delimitan con precisión y claridad los criterios relativos al uso efectivo de la fuerza, delineando las circunstancias y limitaciones de actuación. Son impartidas por la autoridad política competente a los comandantes militares, complementando las clásicas órdenes de misión, tareas y formas de ejecución.
Reglas de Empeñamiento (Rules of Engagement): Instrucciones particulares que delimitan con precisión y claridad los criterios relativos al uso efectivo de la fuerza, delineando las circunstancias y limitaciones de actuación. Son impartidas por la autoridad política competente a los comandantes militares, complementando las clásicas órdenes de misión, tareas y formas de ejecución.
Fuentes:
- en.mercopress.com / South Georgia Newsletter (08.08.2012)
- news.bbc.co.uk (01.06.2005)
- theguardian.com (01.06.2005)
- histarmar.net
- helis.com
- conflictodemalvinas.blospot.com
- "Malvinas. Tras los submarinos ingleses”. Mariano Sciaroni. IPN Editores. 2010.
- “Falkland Islands Review, report of a Committe of Privy Counsellors”. Lord Franks. 1983
- “Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur, ante el conflicto con Gran Bretaña”. Laurio Destefani. 1982
- "Historical Dictionary of British Intelligence". Nigel West. 2014
- Otras
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